sábado, 16 de marzo de 2013

Capitulo 10 ♥


Cuenta Pedro: Me encontraba en la clínica al lado de Lucia, la cual ya estaba  agonizando, ya se habia hecho todo lo posible pero ahora estaba en manos  de Dios y era mejor que se vaya para que deje de sufrir

Lo único que podía hacer era agradecerle el tiempo que estuvo conmigo, mientras yo estaba enamorado de otra mujer

En ese momento me avisaron que Lucia quería hablar conmigo…

Pedro: hola Lu (tratando de no llorar)

Luciana: hola Pepe, quería despedirme y pedirte que me prometas algo

Pedro: no hables Lu que te hace mal.

Lucia: antes de irme quiero hacer las cosas bien,

Pedro: shhh no hables, hiciste las cosas bien, trataste de hacernos felices siempre a Almita y a mí. Gracias a vos es la nena feliz que es ahora.

Lucia: Pero te obligue a casarte conmigo, mientras estabas enamorado de otra mujer

Pedro: vos no me obligaste a nada  yo lo hice porque quise

Lucia: prométeme que cuando me vaya no te vas a quedar solo y vas a buscar a Paula para ser feliz

Pedro: No hables.
Lucia: Prométemelo, Almi no merece crecer sin una mamá, ya la abandonó una y ahora lo va a hacer otra. (Lagrimas en los ojos)
Pedro: Te prometo que voy a buscar a Paula y le voy a dar otra mamá a nuestra hija.
Lucia: Háblale siempre de mi, decile que la amé con todo mi corazón a mi bebita.
Pedro: Siempre le voy a hablar de vos, siempre vas a ser su mamá y vas a tener siempre un espacio en su corazón y en el mío.
Lucia: ¿Me das un beso? Es el último favor que te pido. (Ya con muy poca vos)
Pedro: Si claro. (Dándole un tierno beso en los labios)
En ese momento cerró sus ojos para siempre, Lucia nos habia dejado.

Me dolió mucho que haya muerto la quería mucho y no pude evitar derramar unas lagrimas.

Una semana después…

Ya habia pasado una semana de que habia muerto Lucia, y lo único que hacía era dedicarme a mi hija la cual  me sacaba siempre una sonrisa

Hoy habia ido a pasear con Alma, ya que desde que habia muerto Lucia no salía a ningún lado

Después de pasear todo el día con mi bebita ya era de noche y era hora de que volvamos a casa

Mientras íbamos en el auto le iba cantando y ella se reía hasta que pase por una plaza y vi a alguien tirado

Rápidamente me baje del auto tome a  Alma y me acerque hasta la persona, para ver cómo  estaba

Mientras me iba acercando pude ver que se traba de una mujer, hasta que llegue hasta ella y al darla vuelta, sentí que me moria cuando vi quien era,  no lo podía creer era Paula mi Paula.
Rápidamente le sentí el pulso estaba viva, llevé a Alma de vuelta al auto, la coloqué en su huevito y volví adonde estaba mi amor la cargué en brazos y la senté en el asiento de enfrente haciendo recostar el asiento.
No lo podía creer había encontrado a mi amor después de tanto tiempo, estaba feliz pero a la vez muy preocupado se la veía flaca, demacrada. ¿Donde habrá estado todo este tiempo? Lo importante es que la habia encontrado.

Mientras íbamos en el auto pude ver que estaba volando de fiebre, solo pensaba quien era el culpable de que este asi

Llegue  a mi casa y entre directo  al garaje tome  a  Paula en brazos y con una mano sostenía el huevito de Alma.

Al entrar a mi casa deje Alma en su cuarto mientras que puse a Paula en mi cama

En ese momento escuche…

Paula: Pedro (delirando)

Pedro: Acá estoy mi amor tranquila (besando su frente)

Paula: ayúdame Pedro

Pedro: yo estoy con vos mi amor, no voy a dejar que nada te pase

Paula: Pedro te amo

Pedro: yo tambien te  amo mi amor, descansa

Paula: ayúdame mi amor, sácame de acá no quiero seguir encerrada,

Pedro: Ay mi reina, ¿qué te hicieron? (Poniéndole un paño frio en la frente para que se le bajara la fiebre)
Paula: Pedro mi amor. (Quedándose dormida)
Pedro: ¿Qué fue lo que te hicieron amor mío?, lo importante es que ya estás conmigo. (Besando sus labios)

Por suerte pude bajarle la fiebre y después me fui a dormir al cuarto que era de Lucía antes fui a ver a mi hija.
A la mañana siguiente me desperté, me lave los dientes y me dirigi al cuarto de mi hija a darle su beso de los buenos días,

Cuando  llegué a su cuarto vi una imagen muy tierna, a Paula con Almita en brazos mientras le hablaba con mucho amor, yo las miraba desde el marco de la puerta hasta que me decidí a hablar.......
Pedro: Que bueno que ya estás bien.
Paula: .................

Cuenta Paula: Me desperté y me encontré en un cuarto que  no conocía. Me preguntaba como habia llegado hasta ahí

Solo recordaba que me habia escapado de mi casa y  que estaba en una plaza, de ahí no recuerdo más nada

En ese momento sentí el llanto de un bebe, Salí del cuarto de donde estaba y me dirigi hasta el cuarto de donde provenía el llanto

Cuando entre al cuarto me acerque a la cuna y tome a la bebe brazos

Paula: hola hermosa, ¿qué te pasa tenes hambre?

Ella solo me miraba con los ojitos llenos de lagrimas pero calmada.
Paula: ¿De donde saliste? ¿Sabes que sos muy hermosa? Qué tal si te cambiamos la ropita y después vamos a preparar la mamadera ¿sí? (Besando su cachete)
Empecé a revisar su placard tenía ropa de muy buena marca y muy linda, le elegí un vestidito muy lindo, le cambie el pañal porque estaba mojada y la volví a agarrar en brazos.

Paula: Ya está princesa, ¿cómo te llamas vos?

Estás muy linda, tus papitos seguro te aman mucho. (Lágrimas en los ojos, esta nena tendría la edad de mi hija)
Ella me sonreía y me miraba con esos ojos verdes hermosos, era una bebita hermosa y sentí algo raro al tenerla en mis brazos como una conexión, especial, no sé ni que decía me estaba volviendo loca del dolor.
Estaba hundida en mis pensamientos pero siempre pendiente de la bebé que estaba en mis brazos hasta que escucho una voz que me hizo estremecer por completo que me decía.....
XXX: Que bueno que estás mejor.
Paula: ¿Vos? (Dándome la vuelta para verlo)
XXX: ..........

LEAN EL CAPITULO QUE SIGUE…..

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